lunes, 18 de febrero de 2008

Yelmo. "La Guirles" en memoria de Eugenio Vallejo





Hacía muchos años que no subiámos al Yelmo juntos Silvia, su hermano Antonio y yo.
La primera vez que subí al Yelmo, hará unos 15 años, no lo ví porque estuvo todo el fin de semana lloviendo y con niebla. Antonio nos esperaba en la pradera con la tienda montada y bajó a la "ventana" a buscarnos por la niebla que había. Subimos Fernando y yo guiados por Silvia y con unas cuantas latas de cerveza en lamochila... En realidad empecé a salir a la montaña gracias a Silvia (mi chica) y empecé a escalar gracias a Antonio (su hermano) y a Alberto (mi compañero de cordada), poco a poco me fue ganando el gusanillo de salir a trepar y subir montañas por donde nadie puede subirlas andando. Hicimos un equipo de 4 colegas que querían salir al monte (Jorge, Fernado, Alberto y yo), pagamos con mi visa a crédito el material común (fisureros, excentricos, estacas de nieve, cuerdas, etc.) que fuimos pagando a plazos.
La Pedriza fue nuestra escuela, donde aprendimos, donde nos caimos y donde mejores recuerdos de vias, vivacs, noches, juergas, etc. hemos vivido.


Por todo lo que para mi significa la Pedriza y porque cumplíamos la voluntad de Eugenio para depositar parte de su cenizas aquí, este finde ha sido especial. Pena que Oscar (el hermano pequeño) no nos pudo acompañar por esguince de rodilla... y es que ser el maquinero del snow tiene sus consecuencias (espero que te recuperes pronto ¡máquina!).


Así que salimos de casa a eso de las 9,30h. para cantochino, a las 12 empezábamos a escalar la Guirles. El primer largo hasta la segunda reunión, Antonio y Silvi llevaban varios años sin escalar y subieron muy bien "quien tuvo retuvo". El segundo hasta el arbolito y el tercero lo monté cerca de la zona cimera en una seta. A las 14h. estábamos en la cumbre del Yelmo.


Antonio "el vallejo" como le conocen sus colegas, se agarra fuerte-fuerte, tanto es así, que probablemente después de este finde el Yelmo se haya hundido unos centímetros de la potencia con la que agarraba los garbanzos.... aunque para garbanzos los que nos esperaban en casa de la Maribel...


Aunque un poco tarde a las 16,30h. estábamos en casa dando buena cuenta del cocidito madrileño que nos esperaba. Espero que a los vallejos les haya picado un poquito el gusanillo de volver a trepar y se animen a repetir pronto. Besos.

lunes, 11 de febrero de 2008

Pico de la Miel - EXPRES


Después de un parón importante sin salir a hacer Montaña, teníamos muchas ganas de hacer metros en pared. Estuvimos dandole vueltas para ir al Pajaro de la Pedri... pero las responsabilidades familiares nos mandaron para el Pico de la Miel porque teníamos que estar de vuelta a las 14h. para celebrar el cumple de Silvi y comer con la familia.

En casa, entre baños, cenas, pañales y demás historias, fue fraguando la idea de enlazar vias equipadas del Pico de la Miel, para conseguir hacer bastante metros en unas 4 horas de escalada.
Saliendo a las 8h., a las 9h. a pie de via, hasta las 13h. escalando y a las 14h. en casa.

Así que con unos SMS con Alberto quedamos en llevar 1 cuerda de 70metros, 16 express 4 mosquetas de seguro, 1 grillo y 1 litro de agua. Escalar rápido y ligero como diría M.T.


Total que a las 9h. me tocó empezar por la variante a la derecha del Espolón de Manolín, en un largo de 65 metros llegamos a la base de la EstebanAltieri. Alberto encadenó el primer largo de Licencia para Matar, un 6c con pocas chapas blancas. Después continuamos por un largo con algún paso de 6b y otro más de transición para colocarnos debajo del largo de la placa de la Trompeta. Como siempre en casa pensé que si no traíamos ningún fisurero ni allien, mejor para fortalecer el coco, pero aquí lo ves de otra manera....

Después rapelamos a la vez por cada extremos de la cuerda, eso si, con mucho cuidadito... para colocarnos otra vez en la zona de la Lola Flores. Alberto entró por la Piloto, sin seguros, pero iba muy confiado, hasta la primera reunión de la Doble Cero.

Se curró el largo de placa de la doble cero que tenía pendiente de encadenar, como un lolo. Después me tocó continuar y enlazar el siguiente largo de chapas blancas con la placa de salida de la Thanatos, que también tiene unos alejes alegres...
Finalmente, gracias a la colaboración de unos chavales que salían de la Piloto, rapelamos en simple 70 metros y nos soltaron la cuerda, con otros 2 rapeles en doble, llegamos al suelo y a las 14,15h. estábamos en casa con esta pedazo de familia que me aguanta dia a dia. Besos